miércoles, 28 de noviembre de 2012
El arte de regalar
Podeis pensar que estoy loca, pero comprar regalos es un arte. Un bonito encaje de bolillos (y más en estos tiempos que corren)
Hay a quien le parece tan fácil como ir a una gran superficie, elegir algo, pagarlo, envolverlo (si no te lo hacen allí ya) et voilá! Pero eso no tiene nada de emocionante.
Arte es ser capaz de recorrer la ciudad en busca del regalo perfecto (para la persona a la que va dirigido), encontrarlo y (lo más importante) que encaje en nuestro presupuesto.
Por esto mismo, nunca he entendido a la gente que deja esa tarea para el último momento, quitándole emoción al hecho de regalar.
¿Y qué me decís del momento envoltorio? Mucho mejor algo original, con personalidad, que el típico papel, ¿no creeis?
Personalmente, prefiero ver la cara que pone la persona al abrir el regalo que abrir los míos. Sentir que has dado en el clavo es la mejor sensación.
lunes, 26 de noviembre de 2012
Look4color
Navegando para distraerme un poco, he dado con una aplicación que me parece súper útil.
Look4color es un personal shopper online que te ayuda a buscar desde casa y en un momento la prenda o complemento ideal que te falta para completar ese outfit. Y lo mejor: en el color exacto!
Yo estaba buscando un jersey para mi nueva falda de piel:
1.- Elijo el color: burgundy (puedes fotografiar directamente con tu movil el color que quieres)
2.- Elijo el tipo de prenda/complemento: jersey
3.- Elijo la marca: Zara
Et voilá, todos los artículos de la base de datos de Zara en color burgundy....en la misma página! Como quiero comparar y ver algo más, decido cambiar la marca y me dejo caer por Topshop y....lo mismo!
Una manera rápida y sencilla para conseguir el outfit perfecto. Y encima también hacen descuentos! ¿Qué más se puede pedir?
(podeis seguir sus novedades en facebook)
miércoles, 14 de noviembre de 2012
Momentos
Normalmente es más fácil ver las cosas desde fuera que desde dentro.
Normalmente pesan más los malos momentos que los buenos (por mayoritarios que sean).
Pero que alguien se emocione (y te emocione) contándote un momento (aparentemente insignificante) que ha vivido a tu lado, hace que te replantees muchas cosas, que reflexiones.
Gracias, de corazón.
Normalmente pesan más los malos momentos que los buenos (por mayoritarios que sean).
Pero que alguien se emocione (y te emocione) contándote un momento (aparentemente insignificante) que ha vivido a tu lado, hace que te replantees muchas cosas, que reflexiones.
Gracias, de corazón.
domingo, 4 de noviembre de 2012
Muñeca de Trapo
Sales a la calle, comienzas a caminar y están por todos lados. Podría decir que hay una en cada esquina, pero realmente me quedaría corta. Son más.
Hay miles de tiendas en la ciudad. Entramos y salimos de ellas, pero la mayor parte de las veces nos dejan indiferentes.
Sin embargo, hay otras tiendas en las que al entrar sientes su esencia. Sientes que te transmiten algo, tienen alma.
Son tiendas que hacen que tengas ganas de volver para poder ojear sus nuevas colecciones, pero que también hacen que el cuerpo te pida volver a ellas por el simple hecho de contemplarlas, de volver a sentir su magia.
Hace casi dos años que yo sentí esa magia por primera vez. Tomaba un café en la terraza de una cafetería en Sanxenxo y por delante pasó una chica con una bolsa que me enamoró.
Y yo quería una de esas. Así que eché a caminar por el paseo de la playa de Silgar hasta que di con el cartel de la tienda: era igual que la bolsa.
No es que esté desequilibrada sino que colecciono bolsas especiales y ésa lo era (y mucho).
Así que allá me fui, pensando que sería una tienda más, que sería lo de siempre: entrar, encontrar alguna cosa que me gustara, comprarla y salir de allí (bolsa en mano).
Me equivoqué. Me encontré con Muñeca de Trapo. Un rinconcito en el que perderse.
Un lugar en el que todas y cada una de las piezas de sus colecciones están escogidas con mucho mimo gracias al gran trabajo de su dueña Sharay. Mimo que también ha puesto en la elección de su equipo, que da la forma definitiva a la personalidad de la tienda.
Y ese cariño que pone en las colecciones es el mismo con el que trata a sus clientas. Y siempre vuelven.
Sólo me queda reconocer una cosa: Soy Adicta a Muñeca de Trapo.
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